En los proximos años Washington tendrá que solucionar unos problemas militares políticos más serios que los regionales de ahora en Irak y Afganistán. La China ambiciosa con su economía creciente y el ejército constantemente fortaleciendo empieza a pretender para jugar el papel de líder en la region Asia-Pacífica. En respuesta EE.UU empiezan a “hinchar” de armas a sus aliados regionales Japón y Korea del Sur.
El 13-14 de mayo las fuerzas navales de EE.UU y Korea del Sur realizaron entrenamientos conjuntos cerca de la costa de la península china.
El grupo de choque fue dirigido por el portaaviones USS Nimitz de 97 mil toneladas de desplazamiento. Es una de las naves más grandes del mundo. En el bordo del portaaviones se encuentran nueve escuadrillas del famoso ala 11 de EE.UU que participaba en la guerra de Vietnam.
La razón formal para el aumento de la presencia militar de EE.UU en la costa de China y Korea fue la declaración del gobierno de Corea del Norte de realizar la preparación militar de las armas de Korea del Norte. El propósito real de los entrenamientos es la demostración de la fuerza militar de EE.UU dirigida a Pekin. Segín la opinión de varios expertos la oposición militar de dos economías más grandes del mundo es inevitable.
Para China la solución del “problema de Taiwan” mediante la unión completa e incondicionada de la isla (que ahora de facto se encuentra bajo el control de EE.UU) es un vector estratégico que está ligado con el imperativo de la integridad estatal del Imperio Celeste. Con eso la anexión del desarrollo económico de la región espaciosa sería para la República Popular de China un estímulo mucho más potente que la vuelta de Hong Kong que tuvo una influencia inapreciable a la economía de China y al crecimiento de la autoconciencia nacional de los chinos.
Por otra parte para EE.UU la conservación de “Taiwán democrático” en la esféra de sus interéses es la piedra fundamental de la política exterior. Su idea consiste en apartar la zona de posibles conflictos lo más lejos posible de las costas del continente norteamericano mediante la creación de ficticios hogares de tensión por todo el mundo.
Además no hay que subestimar la cuestión de prestigio. Toda la sociedad está observando la oposición creciente entre China y EE.UU. No va a ser exagerado decir que el fracaso militar en el conflicto con la República Popular China demostrará que EE.UU ya no es el amo en nuestra casa común llamada la Tierra. Precisamente por eso para los “azores” de Washington fue tan atrayente llevar a China a nivel de los tiempos de las “guerras del opio” al mismo tiempo confirmando su superioridad sobre el resto del mundo.
Sin embargo para un país con los recursos de mobilización limitados como los EE.UU por su estructura política es más cómodo guerrear con vidas ajenas. En este caso el apunte se hace en la “democratías” (o en los régimenes, como le guste más) desde su nacimiento endeudadas al Tío Sam por el hecho de su existencia política.
En la región Asia-Pacífica los EE.UU tiene dos aliados que no se quieren y desconfían uno del otro. Japón y Korea del Sur. Además Japón tiene el pasado de un país agresor. Además lleva casi 70 años viviendo con una constitución pacifista. La economía japonesa (¡en el pasado cercano la segunda en el mundo!) es relativamente independiente de EE.UU y el sistema político es inestable. Los políticos locales antes de las elecciones tienen que jugar con el “mapa estadounidense” o mejorando las relaciones con EE.UU o proponiendo cerrar la base estadounidense en Okinawa. En general Japón es un aliado problemático. La El único satélite seguro es Korea del sur que EE.UU que con mucho esfuerzos han reconquistado de los comunistas durante la guerra de Korea de 1950-1953, finaciaron con dinero barato y tecnologías modernas.
Las últimas dos décadas Korea del sur se arma por los estadounidenses supuestamente para la defensa del Norte comunista pero en relaidad para mantener una base antichina cómoda. Las escapadas regulares expansivas por parte de Pionyang solamente facilmente la tarea al Pentágono la tarea manteniendo en la región el estado de una tensión permanente que permite a EE.UU traer aquí sus armadas.
El analisis de la adquisición militar de Seul muestra perfectamente que el ejército de Korea del sur tiene la visión de solucionar las tareas militares profundamente en la retaguardia de la China continental. Así por ejemplo en los años “cero” fue empezado el programa de modernización de las fuerzas aéreas de Korea que incluye 120 nuevos aviones de combate tácticos F15 y ligeros aviones de combate multifuncionales F16. El radio de expluatación militar de estas maquinas llega a dos mil kilómetros lo que se hace insustituible con el territorio enorme del opositor potencial. Además a finales de marzo el Pentágono informó el congreso de EE.UU que a Korea del sur se dirige el primer avión de bombardeo de la quinta generación F-35A. En el futuyro Korea del sur tiene la intención de comprar 60 aviones furtivos por 10,8 billones de dólares de EE.UU.
60 aviones furtivos estadounidenses con la posibilidad de despegue vertical. Es casi la misma cantidad que cabe en la cubierta de USS Nimitz. Es lógico suponer que los planes de Seul de comprar un portaaviones que se discutieron en la reunión del parlamento de Korea del sur en noviembre del año pasado se hacen realidad. El portaaviones en las fuerzas aéreas de Korea del sur llevará una corrección del sistema naval. Hasta una nave de este tipo y por supuesto para la aviación naval se necesita décimas de naves de acompañamiento y introducción de nuevos programas de entrenamiento para marineros y aviadores.
Por fin estos días en los medios masivos apareció el informe de un Centro de investigaciones estratégicas e internacionales (CSIS) cuya oficina se encuentra en Washington, distrito de Colombia. Los analíticos de CSIS declaran claramente que EE.UU tienen que “estimular silenciosamente” a sus aliados Korea del sur y Japón para la creación de “fuerzas de cohete de alta precisión y probablemente de fuerzas atómicas.
Los aviones furtivos, portaaviones grandes, armas atómicas... Demasiado para el honor de calmar Pionyang. El trasfondo es mucho más obvio y horroroso. EE.UU a propósito activan la Carrera armamentista en la región Asia-Pacífica. Desgraciadamente como se sabe el fusil que cuelga en la pared tarde o temprano tendrá que disparar...
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