Su nombre es Vladimir. Pasó por dos de las tales llamadas revoluciones de colores en el 2003 en Georgia y en el 2005 en Ucrania y no como un simple participante sino como uno de los organizadores que trabajaron directamente con los servicios secretos estadounidenses. Se hace llamar "instructor especial".
Lo encontramos en uno de los países de la antigua Unión Soviética. De baja estatura, con canas, se ve mucho mayor de sus 47 años. Largo tiempo permanecio fuera de la luz pública pero despúes de unos días de conversación empezó a hablar y aceptó dar una entrevista. Bajo la condición de anonimato parcial y que se le grabara de espaldas.
Enlace de Tbilisi
En la esféra de política Vladimir entró por casualidad. Nació en 1965 en la familia ruso-georgiana de Zugdidi. Con una biografía bastante común: sirvió en el Ejército y luego estudió en la Universidad de Tbilisi donde enseñaba su padre. La vida de Vladimir tuvo un giro radical antes del colapso de la Unión Soviética. Su padre conocía a la futura estrella de la política georgiana Zurab Zhvania. Este a su vez se hizo cargo del hijo de un amigo. Y luego en 1990 lo empleó en el recién formado movimiento de " los verdes". El ambientalista recién formado se dedicaba a la organización de reuniones confidenciales y a la solución de varios problemas confidenciales.
Es difícil decir cuál habría sido el destino de Vladimir si en el año de 1995 su jefe después de la victoria del partido "Unión de Ciudadanos de Georgia" no se hubiera hecho presidente del Parlamento de Georgia y en donde al igual que antes el ayudante de Zhvania ejecutaba las tareas personales del político, solo que ahora la geografía de sus viajes de negocio cubría Europa occidental y los Balcanes.
Pero la carrera de Vladimir tuvo un cambio notable sólo después de los "cursos de formación" correspondientes. Él tuvo que pasarlos en un campamento especial en el territorio de Serbia: "Hemos estudiado la técnica de realización de las acciones de la ira del pueblo. Es lo que ahora llaman revoluciones de colores. Nos enseñaban los estadounidenses. Entrenaban muy seriamente. Allí conocí a Sam. Nos lo presentaron como Samuel Greenberg, el cual fue uno de los más importantes y ... Él me llevó a la organización serbia "Resistencia". Luego permanecimos en contacto, nos llamábamos constantemente".
Vladimir volvió a Tbilisi en el 2002. Para aquel momento Zhvania ya había abandonado el parlamento y encabezó el movimiento "Demócratas Unidos" apoyado por los estadounidenses.
Curadores de la ira del pueblo
"Yo no me ocupaba en cuestiones de organización mundial”, - repíte varias veces Vladimir. “ No era líder. Me enseñaron a trabajar con los jóvenes, organizar acciones de protesta si se les puede llamar así y creo era bueno en ello".
En el 2003, él junto con un grupo de activistas de la organización juvenil de oposición "Khmara" fueron invitados a Washington en donde la delegación de Georgia fue recibida por Greenberg. El conservador le presentó al jóven luchador de la libertad a sus colegas Michael y Thomas, le hacían preguntas sobre la situación en Georgia, nivel de formación de las futuras acciones de protesta, planes de reconstrucción del país después de la victoria de la revolución. "Dieron consejos valiosos sobre cómo comportarse, cómo trabajar con la gente psicológicamente... "
Además de los consejos el invitado de Georgia recibió un montón de promesas. Podría decirse que Vladimir "ayudó mucho a hacer cumplir con la democracia" y por eso puede esperar alojamiento en EE.UU, ayuda encontrando un trabajo y la compensación de gastos de su viaje. Cinco mil dólares por cierto le fueron entregados de inmediato pero por supuesto que hace diez años para un residente de Tbilisi esta era una suma bastante grande.
Vladimir no sabe cuanto recibieron otros "revolucionarios", muchos de los que asistían a las reuniones informativas de los estadounidenses, él los vió más tarde en diferentes instituciones del Estado de Tbilisi. También trabajaban para el país y en organizaciones informales como Freedom Foundation. Uno de los funcionarios de dicha organización asistió a las negociaciones de Greenberg con los soldados de la futura "revolución de las rosas". La verdad es que hasta el golpe del Estado, la oposición prefería no hacer pública la fuente de financiamiento para el "ampliamiento de la protesta del pueblo" en la república transcaucásica.
Pero en el círculo cerrado los nombres de los líderes de los curadores estadounidenses se pronunciaban abiertamiente. Además al regresar a Tbilisi Vladimir en presencia de Saakashvili y Zhvania habló en una recepción del embajador de los EE.UU. él describió los entrenamientos en Serbia y el viaje a EE.UU. "Ellos son los amos y fue interesante ver todo esto aunque era claro de donde sopla el viento...” recuerda Vladimir,
Hubo que trabajar para pagar por el avance de Washington en noviembre del mismo año. Vladimir de costumbre "se dedicaba a los asuntos de Zhvania", esta vez se trataba del movimiento juvenil de oposición "Khmara." Los funcionarios de menor rango con el dinero de los patrocinadores extranjeros preparaban camisetas y gorras con consignas e imprimían y distribuían volantes con la ayuda de estudiantes. Vladimir se ocupaba de proyectos más serios, él ponía en la radio, en la prensa y en los sitios web materiales de propaganda y personalmente les pagó a los periodistas más condescendientes, algunas veces directamente en sobres, otras veces oficialmente en textos con el título de “publicidad". El dinero Vladimir lo recibía de Zhvania y su asistente Gela. Acerca del éxito de lo sucedido era reportado Sam. No exento de ostentaciónes, en las vísperas de la visita de Greenberg en octubre del 2003, Zhvania le entregó a Vladimir 20.000 dólares para la movilización de la prensa de la oposición, como resultado de ello en el momento de la llegada de Sam todo Tbilisi estaba cubierto de periódicos con furiosos artículos. Greenberg estaba satisfecho e incluso le regaló a Vladimir tres mil dólares en presencia del asistente Zhvania Miho.
La contabilidad de la protesta
El dinero en sobres y amplias credenciales "de la calle" de Vladimir terminaron después de la victoria de la "revolución de color" georgiana. Para viejos asociados de antaño, así como a sus superiores de Estados Unidos él resulto ser innecesario. Zhvania, cargando al asistente de prueba con diligencias pequeñas, no dijo nada acerca de las perspectivas de la carrera, por otro lado Sam y Michael se quejaron del terrible empleo y en marzo del 2004, Vladimir fue llamado a los Estados Unidos.
"Volé a México por alguna razón, y sólo de ahí me trasladé a los Estados Unidos. En Washington, ahí me reuní con el conservador Grindberg, discutimos acerca de las futuras elecciones en Ucrania, luego él me llevó al Freedom Forum (Foro de la Libertad) donde me presentó al jefe del fondo Jack Marsh, periodista y al mismo tiempo defensor de los derechos humanos. Me dió la impresión de que es de la misma oficina que Greenberg porque estaba completamente informado de todo lo sucedido en Georgia y de antemano contó que pasaría en Ucrania hasta en el más mínimo detalle ".
Vladimir fue de viaje de negocios a Ucrania después de que Zhvania le había dado la "luz verde". La organización de la siguiente "revolución de color" íba por un camino establecido. Al haber preparado el plan en Washington Vladimir junto con Andrey Yusov puso en marcha el movimiento de protesta "Ya es la hora". Al igual que n Tbilisi, trabajó con los jóvenes, organizó la campaña Maidan, reunió a la gente y pagó las remuneraciones inevitables en estos casos a los activistas y representantes de la prensa.
En Ucrania pagaban más así que Vladimir manejó cantidades de 30 a 40 000 dólares. "Había dos áreas principales”, recuerda Vladimir. "En primer lugar la distribución del dinero a los manifestantes en Maidan, en segundo la colocación de los materialesde propaganda en la prensa, Internet y televisión. Tenía dos ayudantes cuyos nombres no quiero decir. Son chicos decentes, uno de ellos colocaba los materiales necesarios en la prensa rusa, también por dinero por supuesto ... ".
Igual que en Georgia la preparación de la revolución se financiaba desde los EE.UU. "A través de Georgia pasaba mucha dinero. La trayectoria era la siguiente: Los estadounidenses, Zhvania, Yushchenko y la organización "Ya es la hora". Prácticamente se nos ocultaba a nosotros ni a los ucranianos ni a Zhvania. Todo estaba armado por determinadas estructuras".
Sin embargo Vladimir sospecha que un pequeño flujo de recursos financieros se íba a Rusia. Boris Nemtsov varias veces visitó la sede de los revolucionarios "Natanja" en Ucrania. Vladimir precisa que es poco probable que el oposicionista ruso lo hacía por dinero sino que más bien fue el ansia de poder. Nemtsov no era un extraño ni para los americanos pero no contactaba con Greenberg sino con un tal Boris Abramovich y a veces en las conversaciones telefónicas los interlocutores empezaban a hablar en inglés, con Berezovsky se comunicaba y Julia. "A principios de diciembre en una reunión con los activistas de "Ya es la hora" sonó el teléfono. Julia respondió: "Sí, Boris Abramovich! Aquí, estamos conversando con "Ya es la hora", con los activistas".
Botado del barco de la revolución
Después de la victoria de los "naranja" Vladimir previsiblemente resultó ser no necesario. En febrero del 2005 murió en circunstancias misteriosas su antiguo jefe Zurab Zhvania. Los estadounidenses hasta ahora dispuestos a responder a sus llamadas ya no contestaban el teléfono. Con el dinero ganado en las tormentas de protestas callejeras Vladimir se fue a Europa. Durante un tiempo vivió en Alemania y desde allí se trasladó a Suecia. Más tarde al recordar de su visa abierta anual a los Estados Unidos se marchó a los EE.UU en busqueda de la verdad.
Esta vez los Estados Unidos recibieron a Vladimir con frialdad. Unos meses él buscó una audiencia personal con sus antiguos curadores. Por teléfono les recordó a los estadounidenses acerca de su estadía, trabajo y dinero que ellos prometieron en los albores de la "Revolución de las rosas" de Georgia. Se quejó de que se le expiraba el plazo de vigencia del visado y de los pagos altos por el alquiler del pequeño apartamento que él alquilaba con un inmigrante ilegal en Washington, Greenberg le dijo que esperara pero Vladimir no pudo esperar esta debido a circunstancias que estaban fuera de su control.
Después de llamar al ex curador los eventos se desarrollaron rápidamente. En febrero del 2006 a Vladimir se le expirió la visa, un mes después a su habitación tocaba policía. "Los policías no tenían una órden para la deportación por eso según la versión oficial lo "descubrieron" por casualidad, dice Vladimir, no entiendo de donde sacaron la dirección a no ser que se la hayan pedido a Greenberg .... ".
Los próximos dos meses, Vladimir pasó en la cárcel para inmigrantes ilegales. "Fue un verdadero infierno, no quiero ni siquiera recordarlo pero ahí fue donde finalmente comprendí que yo era un material de desecho".
Como resultado de la investigación a Vladimir lo extraditaron a Georgia pero en el país de la revolución de colores ganada el ex instructor especial se quedo sin el pan y sin el queso. "Después de la muerte de Zhvania para muchos en Georgia yo era por lo menos una persona indeseable, en Ucrania tampoco estaban muy felices de verme y hasta intentaron iniciar un proceso en mi contra".
Como resultado Vladimir se instaló en uno de los países vecinos y sólo al pasar unos años más tarde regresó a su país natal. "Todo ha quedado en el olvido, ahora yo no le intereso a nadie ahí y no represento amenaza ninguna y en cuanto a los estadounidenses ya me he conformado pero para aquellos que ahora están intentando establecer contactos con ellos puedo decirles que para ellos solamente somos basura desechable a la cual usaron y desecharon".
Información
Los Estados Unidos ni siquiera ocultan el hecho de que activamente "apoyan" a los políticos beneficiosos en otros países. En 1961 por decreto del presidente Kennedy fue creada la Agencia para el Desarrollo Internacional (USAID) que durante medio siglo bajo la estricta guía del Departamento de Estado (Ministerio de Relaciones Exteriores estadounidense) lleva la democracia estadounidense por todos los paises del mundo. ¡Es un asunto tan importante para los EE.UU que unicamente el año pasado en eso fueron gastados más de 23 mil millones de dólares!
Los "preferidos" en el territorio de la ex Unión Soviética y USAID aparecieron casi inmediatamente después de la caída del "imperio del mal". En los años 90 Ucrania se convirtió en el tercer país del mundo en términos de ayuda financiera por parte de los Estados Unidos (después de Israel y Egipto) y Georgia en el tercero en el financiamiento per cápita (siguiendo Israel y Egipto).
Sin embargo según Washington a comienzos del año 2000 los gobiernos de ambos países perdieron el rumbo y por eso USAID redujó el nivel general de apoyo a estos países, pero aumentó drásticamente la financiación de programas de ayuda a las elecciones y partidos políticos pero trás un bonito nombre en realidad se ocultan las actividades de preparación de revoluciones de colores. En el 2001 la oposición ucraniana año recibió para estos propósitos $2.290.000, y la de Georgia $ 0,62 millones. En el 2003 ya eran $5,04 millones y $2,72 millones respectivamente. Un año más tarde, la financiación de "Maidan" creció hasta 7 680 000 dólares (según el informe de los datos de USAID en el 2006 al 2007).
El actual embajador de EE.UU en Rusia y en aquellos tiempos profesor de Ciencias Políticas en Stanford Michael McFaul en un artículo de The Washington Post del 21 de diciembre del 2004 escribe lo siguiente: "¿Intervenían los estadounidenses en los asuntos internos de Ucrania? Sí. Los agentes de influencia de Estados Unidos preferirían llamarlo de otro modo por ejemplo promoción de la democracia, el apoyo a la sociedad civil y etc. pero su propósito eran que los cambios políticos en Ucrania.
USAID, "La Fundación Nacional para la Democracia" y otras instituciones se financiaban por algunas organizaciones estadounidenses, incluyendo Freedom House, el Instituto Republicano Internacional, el Instituto Democrático Nacional, el Centro de Solidaridad y otros para proporcionar donaciones y asistencia técnica a la sociedad civil ucraniana. La Unión Europea, algunos países europeos y la Fundación Internacional de renacimiento financiado por Soros hacían lo mismo. Las organizaciones occidentales proporcionaron capacitación y apoyo directo al Comité de Electores de Ucrania ...
Organizaciones occidentales también han prestado apoyo a los medios de comunicación independientes. Freedom House y otros apoyaron la Coalición por el derecho libre que incluía el movimiento de estudiantes "Ya es la hora". Con la ayuda de conferencias y publicaciones estas organizaciones estadounidenses garantizaban el flujo de información y los contactos entre los demócratas de Ucrania y sus colegas en Eslovaquia, Croacia, Rumania y Serbia ... El Instituto Republicano Internacional y el Instituto Democrático Nacional realizaban programas de entrenamiento para los partidos políticos ucranianos, algunos de los cuales más tarde se unieron a la coalición de Yushchenko".
En su informe del año 2006 USAID se expresó con menos tapujos que "los Estados Unidos hicieron la contribución principal en los cambios democráticos de paz recientes en Georgia y Ucrania".
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